Su historia
Por lo general, las historias de cómo se conoce una pareja (en la escuela o el trabajo, a través de amistades o familiares, o en una aplicación de citas) y cómo se compromete (¡en una cena romántica el día de San Valentín!, ¡en una puesta de sol en la playa! o ¡frente al Taj Mahal!) son acontecimientos independientes.
No fue el caso de Iman, que conoció a su futuro marido en un encuentro de diez minutos en el que se “formalizó el compromiso” el día antes de la boda.
Cómo se conocieron
Salim se enteró de que un hombre de la aldea estaba dispuesto a desposar a su hija. Ese hombre y el padre de Iman, Ismael, acordaron que el precio por la novia sería 600.000 riales yemeníes (unos 1.000 dólares) y 20 gramos de oro. Al mes siguiente, Salim fue de visita a casa de Ismael y se reunió con la novia por primera vez durante diez minutos. Ese breve encuentro recibió la consideración de “formalización del compromiso”.
Justo el día siguiente, Iman se quedó en casa mientras Ismael y Salim acudieron al centro del distrito para firmar el contrato nupcial. Su padre aportó toda la información, incluso la edad de Iman, afirmando que tenía 15 años, pese a ser mentira. El asesor del juzgado no exigió el consentimiento de la novia.
Con solo 8 años, Iman no entendía lo que estaba sucediendo. Después de la firma del contrato nupcial tuvo lugar una celebración. Iman llevaba un vestido blanco nuevo y la habían peinado y maquillado dando a entender que estaba a punto de convertirse en una mujer casada, también le pintaron las manos con un complicado diseño con henna. Estaba muy feliz porque creía que se trataba de un juego de disfraces y se sentía mayor incluso al jugar con los otros niños durante las celebraciones de su propia boda.
Los nombres y los datos de identificación han sido modificados por razones de confidencialidad y protección. Fotografías utilizadas solo para fines representativos.
A causa del prolongado conflicto, los intentos jurídicos por establecer la edad mínima para el matrimonio en los 18 años fracasaron. Casi dos tercios de las niñas del Yemen son casadas antes de los 18, y muchas de ellas antes de los 15. Las niñas de poblaciones desplazadas son las más vulnerables. El matrimonio infantil no es ilegal en el Yemen, y la única protección de que disponen las niñas es la Ley sobre el estatuto personal, que prohíbe las relaciones sexuales hasta que la niña alcanza la pubertad. En general, la policía y el poder judicial actúan cuando se denuncia un matrimonio infantil. Pruebas anecdóticas de varios establecimientos sanitarios de la provincia de origen de Iman ponen de manifiesto un aumento del número de las novias jóvenes que sufren violencia física y abusos sexuales el primer día de casadas. Asimismo, cada vez ingresan más niñas menores de 16 años con complicaciones en el parto y para someterse a cesáreas. Muchas niñas no tienen certificado de nacimiento, y la edad que suele escribirse en los contratos nupciales es 15 o más, independientemente de la edad real de la niña. El UNFPA financia nueve refugios de protección para mujeres y 51 espacios seguros para mujeres y niñas repartidos por todo el país que ofrecen apoyo psicosocial, formación en competencias para la vida, capacitación sobre medios de subsistencia y oportunidades de empoderamiento económico.
La familia
Iman, 8 años
LA NOVIASalim, 31 años
EL NOVIOFamilia de la novia
Ismael
padre
Tras perder su trabajo de obrero y no poder mantener a su familia, decidió casar a sus hijas por desesperación económica. Dependen de sus vecinos para comer.
Malika
madre
Abandonó a su familia cuando ya no pudo soportar más los abusos físicos y emocionales por parte de su marido.
Ruquia
THE OLDER sister
Casada a los 14 años con un hombre de 25; ahora tiene dos hijos.
Yasser
hermano
Tiene problemas de salud mental.
Amal
hermana
No asiste a la escuela.
Ibrahim
tío
Cuando trató de convencer a su hermano de que no casara a Iman, Ismael le respondió: “Yo no puedo mantenerla, ¿la quieres para tu hijo?” También pidió ayuda a un anciano de la tribu, pero técnicamente el matrimonio infantil no es ilegal en el Yemen.
Afaf
tía
Vive en dos habitaciones pequeñas con cinco niños.
Familia del novio
Información no disponible.
Cronología
En lugar de un programa nupcial de un fin de semana repleto de cócteles de bienvenida, cenas de ensayo, recepciones posteriores a la ceremonia, fiestas con bailes hasta muy tarde y desayunos de despedida, el cronograma de una niña casada puede incluir oportunidades perdidas, embarazo en la adolescencia, violencia, abusos y trauma psicológico. Su infancia se ha terminado.
Inmediatamente
Los matrimonios infantiles o las uniones precoces suelen suponer que las niñas abandonen la escuela. A corto plazo, pueden sufrir aislamiento social y trastornos psicosociales al dejar a sus amistades y familiares para vivir en casa de un extraño prácticamente. A largo plazo, al no tener formación, su independencia económica resulta casi imposible. Si el matrimonio termina, las oportunidades de obtener ingresos y mantenerse por sí mismas —por no mencionar a los hijos que puedan tener— son limitadas, por lo que la pobreza se convierte en su modo de vida.
Demasiado pronto
El matrimonio infantil es un factor impulsor del embarazo en la adolescencia, ya que es posible que las jóvenes no conozcan los métodos de planificación familiar, no tengan acceso a ellos, o sus maridos o familia política no les permitan usarlos. Están expuestas a contraer infecciones de transmisión sexual, y pueden no estar preparadas física ni emocionalmente para la maternidad. A escala mundial, una de cada tres niñas dará a luz antes de los 20 años, y las complicaciones relacionadas con el embarazo y el parto son una de las principales causas de muerte entre las niñas de 15 a 19 años.. También podrían sufrir devastadoras lesiones durante el parto, como la fístula obstétrica. Algunas de estas madres, si el bebé nacido no es un varón, pueden ser víctimas de violencia por parte de su marido y la familia de este. Los partos en adolescentes suponen el 16 por ciento de todos los nacimientos. Casi la mitad de los primeros partos en la adolescencia son de madres de 17 años o menos; el 6 por ciento corresponde a madres de 14 años o menos. Más del 50 por ciento de embarazos posteriores en la adolescencia suceden en los 23 meses siguientes al último parto.
De principio a fin
No es infrecuente que los maridos, la familia de estos o todos ellos ejerzan violencia y abusos en el marco de los matrimonios infantiles. Se estima que las niñas casadas antes de los 15 años tienen un 41 por ciento más de probabilidades de padecer violencia de pareja que las mujeres casadas después de los 18. Las jóvenes sienten que no tienen dónde acudir y a menudo sufren en silencio o en condiciones peores.
La oportunidad de una nueva vida
La Unión de Mujeres del Yemen (YWU, por sus siglas en inglés), asociada del UNFPA, reaccionó ante los rumores de que una niña de 8 años iba a contraer matrimonio. La YWU denunció el caso ante un abogado de distrito quien, a su vez, designó a un consultor jurídico para que investigara el caso de Iman.
Puesto que Iman parecía mucho menor de 15 años, la edad que figuraba en el contrato nupcial, el consultor jurídico pidió al asesor del juzgado que no emitiera el contrato hasta que se pudiera determinar la edad de la novia. Una vez un familiar confirmó que Iman tenía 8 años, el consultor jurídico denunció al padre, Ismael, a Salim y a dos testigos, y reclamó el divorcio.
El abogado realizó los trámites para que Afaf, la tía de Iman, cuidara de ella durante el proceso de divorcio; más tarde se le concedió la custodia de Iman, Yasser y Amal. Ismael firmó una carta en la que se comprometía a no intentar casar de nuevo a Iman.
Sobre el papel, Iman estuvo casada dos semanas. Empezó tercero de primaria en septiembre.
Nuestros votos
Muchas niñas no son rescatadas como lo fue Iman. En la actualidad, más de 650 millones de mujeres y niñas de todo el mundo han sido casadas o se encuentran en uniones informales antes de los 18. El matrimonio infantil constituye una violación de los derechos humanos impulsada por la pobreza y la desigualdad de género, entre otros factores. Las familias empobrecidas ven el matrimonio como un modo de alivianar su carga financiera, de obtener beneficios económicos cuando se les entregan productos básicos como ganado o dinero por la mano de sus hijas o de encomendar el cuidado de sus hijas a una familia que las pueda mantener. El matrimonio infantil puede aumentar en contextos humanitarios y frágiles, puesto que los conflictos, los desplazamientos y los desastres climáticos pueden diezmar los medios de vida e interrumpir la educación. Pese a que el matrimonio infantil está prohibido casi de manera universal, se estima que cada año contraen matrimonio unos 12 millones de niñas.
Negar a una niña o una mujer el derecho a decidir con quién y cuándo casarse acarrea consecuencias graves e importantes para su salud y bienestar, incluidos el embarazo precoz, la violencia, los abusos y el trauma psicosocial.
El Programa Mundial del UNFPA y UNICEF para acelerar las medidas para poner fin al matrimonio infantil actúa en 12 países con una alta prevalencia de matrimonio infantil. El programa se esfuerza en trabajar a escala y no dejar a nadie atrás: en 2020, 4,1 millones de niñas adolescentes participaron en intervenciones de formación en competencias para la vida y educación sexual integral; más de 160.000 niñas adolescentes recibieron apoyo para matricularse o continuar en la escuela primaria o secundaria; se llegó a más de 6,3 millones de niños y hombres con mensajes de lucha contra las masculinidades tóxicas y las normas de género perjudiciales; y 1.150 puntos de prestación de servicios recibieron apoyo para ofrecer servicios adaptados a las niñas. El Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 5 persigue lograr la igualdad de género y empoderar a todas las mujeres y las niñas, lo que incluye acabar con la práctica nociva del matrimonio infantil para 2030.
Debemos acelerar los progresos para que las niñas no se vean privadas de sus infancias por convertirlas en esposas antes de que estén preparadas y dispuestas. El día de su boda debería ser el comienzo de un nuevo capítulo en su vida, no el principio de una cadena perpetua. La decisión sobre su matrimonio debería ser libre, no dictado por las circunstancias, y debería ser fruto del amor, no de la pérdida o las carencias. Solo así es digno de celebración.
Lista de regalos
En algunas partes del mundo, las parejas comprometidas crean una lista de bodas con los artículos que quieren, de modo que los invitados que quieran hacerles un regalo lo tengan más fácil. Poner fin al matrimonio infantil para 2030 en 68 países prioritarios requiere una inversión de 24.100 millones de dólares. Solo en los Estados Unidos se gastan al año en regalos de boda 19.000 millones de dólares.
Fuente: Loop Capital
A continuación figura artículos que suelen encontrarse en tales listas junto con lo que se podría financiar con el valor monetario que tiene cada uno de ellos para ayudar al UNFPA y sus asociados a poner fin al matrimonio infantil como parte de los esfuerzos de su programa y ofrecer a las niñas el regalo legítimo de la libertad.