La violencia y la anarquía han alcanzado niveles aterradores en Haití. Alrededor de 185.000 personas han sido desplazadas en el Área Metropolitana de Puerto Príncipe, dos tercios de ellas viven en lugares espontáneos con acceso muy limitado a los servicios básicos. La crisis del hambre en Haití también está aumentando rápidamente. Casi 5 millones de personas, casi la mitad de la población del país, enfrentan ahora grave inseguridad alimentaria y luchan por alimentarse.  

Las mujeres y las niñas sufren oleadas incesantes de violencia brutal, incluidas violaciones y violaciones en grupo, mientras las pandillas compiten por el control de la capital. La falta de servicios de protección y apoyo aumenta el trauma para las mujeres y las niñas; la mayoría de los servicios para las sobrevivientes de la violencia sexual se reanudan lentamente a través de clínicas móviles apoyadas por el UNFPA en los lugares de desplazamiento.

El sistema de salud no ha salido ileso. Las instalaciones de salud y los hospitales se han visto obligados a cerrar en Puerto Príncipe, los medicamentos son escasos y las instalaciones carecen de personal; alrededor del 40 por ciento del personal médico de Haití ha abandonado el país debido a la inseguridad. El acceso a las instalaciones que permanecen abiertas es casi imposible debido a la agitación, lo que deja a unas 3.000 mujeres embarazadas en la capital sin acceso adecuado a la atención de salud materna.

A fin de garantizar que continúen los servicios de salud y protección reproductiva, el UNFPA está distribuyendo suministros médicos esenciales para la prestación de servicios de salud y protección materna a los centros de salud y hospitales que siguen funcionando. Se han desplegado clínicas móviles en los lugares de desplazamiento para prestar servicios de salud reproductiva y apoyo a fin de prevenir y responder a la violencia, y una línea telefónica directa y espacios seguros están proporcionando apoyo médico y psicosocial a las mujeres y las niñas. En los lugares de desplazamiento se han distribuido artículos esenciales de higiene, incluidas toallas sanitarias.

A pesar de las crecientes necesidades, la financiación para la protección de las mujeres y las niñas es lamentablemente insuficiente. En 2024, el UNFPA hace un llamamiento para que se recauden 28 millones de dólares para responder a las necesidades humanitarias a fin de garantizar que las mujeres, las niñas y las sobrevivientes de la violencia puedan acceder al apoyo de salud reproductiva y protección que necesitan.

Actualizado el 25 de junio de 2024