Se están produciendo avances logrados con mucho esfuerzo para proteger los derechos de las personas lesbianas, gais, bisexuales, transgénero, queer, intersexuales y asexuales en todo el mundo; pero aún queda mucho camino por recorrer.
Para poner de relieve los avances y los retos, el lema del Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia de este año es: «Que nadie se quede atrás: Igualdad, libertad y justicia para todos».
Entre los avances recientes se incluyen los siguientes: las normas sociales y jurídicas han dejado de criminalizar a las personas LGBTQIA+ y han pasado a salvaguardar sus derechos. Desde 2019, 11 países han legalizado la igualdad matrimonial. Desde 2017, 13 países han eliminado las leyes que criminalizan la sexualidad LGBTQIA+.
Además, las políticas que protegen los derechos de las minorías sexuales y de género están ganando terreno a todos los niveles. En los últimos meses, los organismos de las Naciones Unidas han pedido una atención del VIH adaptada a las personas transgénero, la protección de los derechos de las personas intersexuales y el fin de la discriminación contra las personas LGBTQIA+ en los servicios de salud.
Estos cambios han empoderado a las personas LGBTQIA+ y han impulsado a los sistemas sanitarios a mejorar el acceso a una atención sensible y libre de estigma.
Sin embargo, a pesar de los avances, la discriminación y el estigma persisten, lo que provoca graves disparidades sanitarias y otras desigualdades. Decenas de países siguen criminalizando las relaciones consentidas entre personas del mismo sexo. En algunos lugares, las personas LGBTQIA+ pueden ser condenadas a muerte por su identidad, lo que las hace muy vulnerables a las violaciones de sus derechos y les limita el acceso a los servicios de salud. Y muchos líderes políticos utilizan políticas polarizadoras y una retórica dañina.
Todo esto hace que las personas LGBTQIA+ tengan más probabilidades de verse obligadas a enfrentarse a la pobreza, la violencia y otras formas de marginación. En tiempos de emergencias humanitarias, como las crisis climáticas, las desigualdades se agravan. Las consecuencias pueden poner en peligro la vida de los afectados, obligándoles a luchar por conseguir refugio y ayuda en caso de catástrofe debido a la discriminación y el abandono.
En honor a este día internacional, el UNFPA pide la integración de los derechos LGBTQI+ y de la salud y los derechos sexuales y reproductivos en las políticas humanitarias y de resiliencia climática mundiales.
El UNFPA defiende los derechos y las opciones de todos, en todas partes. «Las personas LGBTQIA+ merecen disfrutar plenamente de todos sus derechos, como cualquier otra persona», afirma la Directora Ejecutiva del UNFPA, la Dra. Natalia Kanem. «Sin embargo, a pesar de los avances en muchas partes del mundo, a menudo siguen sufriendo una grave discriminación y estigma. Eso es inaceptable. Durante los conflictos y las crisis, sus derechos pueden pasarse por alto y sus necesidades específicas de protección y atención sanitaria pueden quedar desatendidas. No dejar a nadie atrás significa salvaguardar los derechos de las personas LGBTQIA+ en todos los contextos e incluirlas plenamente en la planificación humanitaria, la respuesta, el socorro y los esfuerzos de recuperación».
